La clave está en elegir todos los días a la persona que elegiste hace tiempo.
Por eso para estar contigo no tengo argumentos lógicos, tampoco improvisados. Se puede decir que todo fue por impulsos, por puro instinto. Fue como tu manera de hacer las cosas; la forma que tenías de mirarme de reojo, esa media sonrisa, esos gestos que hacías sin darte cuenta siquiera. Fue que me tiraste el salvavidas cuando no podía nadar, que me pusiste pancartas luminosas cuando no encontraba la salida. Que me abrazabas cuando tenía frío, y que con un abrazo me hacías fuerte ante todo y ante todos.



No hay comentarios:
Publicar un comentario